Juan Luis Panero (Madrid, 1942-Torroella de Montgrí, Girona, 2013). Hijo de Leopoldo Panero y hermano de los también escritores Leopoldo María y Michi. Uno de los novísimos que no entraron en la polémica antología de José María Castellet. Destacó — en sus poemarios A través del tiempo (1968), Los trucos de la muerte (1975), Desapariciones y fracasos (1975), Juegos para aplazar la muerte (1966-1983) (1984), Antes que llegue la noche (1985), Galería de fantasmas (1988), Los viajes sin fin (1993) o Enigmas y despedidas (1999)—, en primer lugar, por la vinculación con una tradición literaria más europea que española (Ezra Pound, T. S. Eliot, Pessoa, pero también Valente, su propia padre y, desde luego, Luis Cernuda) y el acercamiento obsesivo a unos mismos temas: «su poesía no es, en el fondo, sino una grave reflexión ética sobre el paso inexorable del tiempo, la sensación de fracaso, el sentimiento de melancolía y la fascinación por la muerte», como afirma Huerta Calvo.